Cachoflas:
-¡Canastos! Cómo tarda la progenitora de la progenie que nunca tendré en dormirse… y eso que se tomó su Cal-C-Tose antes de acostarse. Pero en fin, parece que poco a poco empieza a dejarse abrazar por Morfeo. Un momento… ¿por qué se deja abrazar por Morfeo? ¡Y en mi presencia, ingrata…! ¿Es a caso que me está engañando con él? ¡Cáspita! ¡Pues que se quede con su Morfeo! Yo me voy a auxiliar a mis ingenuos amigos, mira que creer en el Chotacabras…
Y entretenido en sus turbulentos pensamientos, se dispone a prepararse con su traje negro de investigador (hecho de cuero y espuma de látex para mantener el calor corporal por la noche) con todo tipo de artilujios colgados del cinturón, útiles para la misión que desempeñaría aquella noche.
Por fin, sale tarareando y pedaleando su Batbike (por no decir Batibici, porque le resta categoría) que su mujer le prohibiría montar si se enterase.
Al llegar, Cachoflas irremediablemente tuvo que cruzarse con Ifigenio que permanecía acomodando algunas cosas en la recepción del edificio, ataviado con un coqueto pijama de bomberitos.
Ifigenio:
-¡Bendito sea el creador! ¿Qué hace usted aquí? ¿No debería estar disfrutando de la noche con su cónyugue?
Cachoflas:
-Recontra cáspita… ¿cómo que “cónyugue”? ¡Naco! ¡Es CÓN-YU-GE!
Ifigenio:
-¿Solo a eso vino, a insultificarme?
Cachoflas:
-En realidad vine a ver a los Buenavista, pero no esperaba encontrarme con semejante espectáculo. Como sea, con su permiso o sin él, pasaré a ver a mis amigos.
Yoni:
-¿La voz que escucho es de mi camarada?
Cachoflas:
-Así es, mi buen amigo, venga, baje por las escaleras y salúdeme. --Al avanzar un poco más, Yoni no contaba con el borde del primer escalón, y dando un traspié sencillamente rodó por la escalera.-- ¡Híjole, pero cuidado…! ¿Pues qué no ve lo que hace?
Ifigenio:
-Pero qué pregunta más tonta.
Cachoflas:
-Es obvio que la pregunta es retórica.
Ifigenio:
-Sí, es lo que dije: es tonta, estúpida, retórica…
Cachoflas:
-Está visto que es usted un ente con una mente completamente incompetente, incapaz de pensar coherenteMENTE –y refuerza su cacofónica frase con un enérgico ademán-.
Ifigenio:
-¿…?
Cachoflas:
-Pero ya basta. Para escuchar idioteces, me basta y me sobra con las que dice Yoni… ¡Yoni! ¿Ya ve? Usted distrayéndome y Yoni que necesita de mi auxilio… ¿cómo está, mi amigo?
Yoni:
-Oiga, de veras que hoy viene haciendo preguntas demasiado retóricas… ¿cómo cree que estoy?
Cachoflas:
-Mire, mejor véngase para su departamento y allá vemos qué tal estuvo el trancazo, porque aquí ya se está contagiando de la taruguez de cierta gente… así que vámonos.
Junto suben las escaleras y entran al departamento Noveno B del edificio Bellavista, donde se reúnen con Mará y Elvelos, que siguen aterrados (de terror, no de tierra) por lo que ha estado ocurriendo aquella noche.
Mará:
-Hasta que se te ocurre venir, ya me empezabas a caer mal por tardarte.
Cachoflas:
-Yo no tengo la culpa, estuve esperando a que mi mujercita se durmiera para poder venirme sin que se diera cuenta.
Elvelos:
-Este... ¿pero qué es eso que traes en el cinturón?
Cachoflas:
-Pues es lo que trae incluído mi traje. Cuenta con un poderoso gas pimienta, un aromatizante, una linterna sorda…
Mará:
-¡¿Quién es gorda?!
Cachoflas:
-Dije sorda, es una linterna sorda… y además de eso traigo unos walkie-talkies manos libres para estar en comunicación, con señal de amplia cobertura. Bueno, eso me dijo el vendedor de Radio Shack.
Mará:
-¿Dijiste aromatizante? ¿Y eso para qué?
Cachoflas:
-Ps no lo sé, pero hombre prevenido vale por dos, y como dos piensan más que uno pues entonces… pero puede servirnos de algo; ¿qué tal que nos dan ganas de ir al baño en plena misión?
Elvelos:
-Este… ¿Y esos ganchos de ropa? ¿Son para colgar de ahí al Chotacabras cuando lo atrapemos?
Cachoflas:
-Bueno… en realidad yo los traía para ver si eran útiles para colgarme de las paredes y hacer piruetas, así como mi mentor de ficción, Batman.
Mará:
-De veras que eres un geek loco. Pero yo opino que es mejor que veamos que sucede cuanto antes, porque ya se va haciendo noche.
Cachoflas:
-De acuerdo, porque yo tengo que estar de regreso antes de que despierte la dueña de mis sueldos… quiero decir, de mis sueños. Miren, les traje unos trajes especiales, algo así como disfraces que se confunden en la oscuridad.
Yoni:
-¡Genial, como superhéroes!
Cachoflas:
-Sí, cómo sea. Tengan pues, vístanse.
Elvelos:
-¡Este, yo no me voy a poner eso! ¿Por qué me trajiste uno rosa?
Cachoflas:
-No es rosa, es rojo oscuro…
Elvelos:
-¡Si insinúas algo por qué no mejor me lo dices! ¿Te parezco gay?
Mará:
-Mira Elvelos, cállate y póntelo, si no quieres que te añada un hermoso moño morado para tu cabeza.
Se visten todos apresuradamente.
Mará:
-¡Este traje me hace ver gorda! Y además se me notan más los lunares…
Cachoflas:
-¿He de recordarles que es de noche y trabajaremos en absoluta oscuridad? Ninguno de sus traumáticos defectos quedarán a la vista de la gente. Además, dudo que tus... ¿qué, 45 kilos?, te hagan ver gorda en lo absoluto.
Ahora tome cada uno su walkie-talkie y cuélguenselo del cinturón, estaremos comunicados constantemente. Recuerden que las capuchas de sus trajes tienen lentillas de visión nocturna, que intensifican cualquier fuente de luz, por lo que no será tan necesario el uso de las linternas. Lo siento por Mará, quien tendrá dificultades para ver, puesto que la capucha no le permitirá usar sus anteojos. Como sea, teniendo yo el mismo problema, adapté un sistema de corrección óptica en las mismas lentillas. No sé qué tan bien sirvan en situaciones donde la iluminación se vea totalmente comprometida. Esta noche lo averiguaremos, jejeje.
Cualquier cosa que veamos, escuchemos o notemos, lo haremos saber inmediatamente a los demás, junto con nuestra ubicación exacta. No entren en pánico y no hagan estupideces; este debe ser un trabajo en equipo, porque me temo que tratamos con un asunto peligroso.
Yoni:
-Solo que hay algo importante que debo hacer antes de empezar.
Cachoflas:
-¿Qué es?
Yoni:
-Quiero hacer pipí…
Mará:
-Ash, es que este niño tiene tanque pequeño, de niña.
Yoni:
-¡No es cierto! Es que tomé mucha agua.
Mará:
-Sí claro… apúrate ¿quieres?
Cachoflas:
-En lo que sale del baño Yoni, les diré que la idea es ir cada uno por un lado diferente, con sus respectivos walkie-talkies. Obviamente, Yoni iría conmigo para que no batalle él solo. Tengan mucho cuidado y cualquier cosa comuníquenlo a los demás.
Mará:
-Lo extraño es que ya no se escuchan los gritos que se oían hace rato, está todo muy tranquilo y eso me asusta.
Yoni:
-Estoy listo, vámonos.
Mará:
-¿Quieres subirte el cierre, por favor?
Yoni:
-Uf, lo siento.
Cachoflas:
-Vámonos entonces.
Salen los cuatro dispuestos a descubrir qué es lo que ha estado sucediendo en las recientes horas en el edificio.
Cachoflas:
-Venga camarada, esta sección es la que nos toca inspeccionar, que a la luz de esta linterna todo parece muy tranquilo. Usted utilice el Grano de la Verdad y la Justicia de su nariz para ver qué vibraciones percibe en el ambiente…
Elvelos:
-Este, aquí reportándome. A la luz de la vela que traigo en la mano… hagan de cuenta que puedo alcanzar a ver una sombra moviéndose frente a mí, puede ser un animal.
Mará:
-¿Qué dices? ¡Animal lo serás tú!
Elvelos:
-Este, olvídenlo, era Mará la que estaba aquí… cambio y fuera.
Mará:
-Diez-cuatro, aquí ando. Esto de hablar por el radio es divertido… ¡esperen! Aquí… kjjjj… algo… kjjjjj…
Cachoflas:
-Mará ¿me oyes? Estos condenados radios baratos…
Yoni:
-Su-radito no sirve, mi amigo.
Mará:
-¡aaaaaaaaaaahhhhh…! Kjjjj… ¡Son… kjjjjjj…. Amgnmsters…! Kjjjj…
Cachoflas:
-¡Canastos! ¿Dijo “gángsters”? Lo que me temía… Vamos, ¡busquémosla!
Elvelos:
-Este, creo saber por dónde andaba, haz de cuenta que estaba en el último piso, cerca de las escaleras para subir al techo.
Cachoflas:
-¡Ve a auxiliarla, yo voy en camino! Y si me ven llegar, apártense ¡porque atacaré a los enemigos con mi gas pimienta!
Yoni:
-Ps yo digo que son más eficientes mis gases corporales, pero como usted quiera. Por cierto, antes de ir a ayudarla, ¿podríamos hacer una parada en uno de los departamentos? Es que quiero hacer pipí de nuevo.
Cachoflas:
-Caramba con usted… mire, este departamento está abierto; métase ahí y busque el baño, yo iré a auxiliar a los demás. Si necesita algo me llama por el radio.
Yoni entra al departamento con cuidado, palpando todo a su alrededor. Sin embargo, no pudo evitar tropezar con varios objetos dispersos en el piso, golpeándose y cayéndose constantemente. Al final, tropezó con la pata de una pequeña cama que se encontraba al fondo del cuarto, cayendo sobre una muchacha regordeta que dormía en ella. Esta despertó sobresaltada…
Desconocida:
-¿Pero que diabloz zucede? ¿Quiénd erez tú y qué hacez endcima de bí? ¡deprabado! ¡indfeliz!
Yoni:
-Lo siento, lo siento… es que no veo nada…
Desconocida:
-Zíí claro, ezo dicend todoz loz tipoz de tu claze… ¿end dóndde eztoy? ¿Be zecueztrazte a cazo? Ezta ndo ez bi caza…
Yoni:
-Pues yo no sé si sea tu casa, pero el punto es que estás en un departamento del edificio Bellavista, acostada en una desvencijada cama, con un desastre de cosas regadas a tu alrededor…
Desconocida:
-Y cond und idiota endcima de bí… ¡quítate!
Mientras tanto…
Cachoflas:
-¿Dónde están estos niños? Ya me estoy preocupando… aunque no he escuchado ningún ruido fuera de lo común.
Mará:
-¿Me oyen…? ¡Quier… kjjjjjj… matar… kjjjjjjj… malditos…!
Cachoflas:
-¡Por las risas de Guasón! ¡Mará, tranquila, voy en camino para ayudarte, estarás bien!
Y en el cuarto donde Yoni acaba de toparse con tan peculiar muchacha…
Desconocida:
-¡Ziguez zind eczplicarbe qué hago aquí y por qué be tiendez zecueztrada!
Yoni:
-Te lo explicaría con gusto, pero es que tengo que ir al baño. Cuando salga te digo lo que sé.
Desconocida:
-¡Pero apúrate! Be ziendto cobo dezgandada, cond buy pocaz fuerzaz para levandtarbe. Y be duele bucho bi cabeza… ¿qué be habrá pazado?
Yoni:
-Listo, estoy mejor.
Desconocida:
-Buy biend, pero andtez de eczplicarbe qué zucede ¿puedez zubirte el cierre, por favor?
Yoni:
-Condenado cierre…
¿Quién es esta extraña desconocida? ¿qué les ocurre a Mará y Elvelos? ¿Qué misterio encierran las paredes de este edificio?
Continuará...