Danielov:
-Maldito, usté me sigue llevando 25 posts de ventaja. Tengo que alcanzarlo. Sé que mi producción postística puede aumentar; nomás es tener tiempo de escribir todo lo escribible.
Pith:
-Nel, no me dejaré.
Danielov:
-¡Ja! pues sin escribir temas, dudo que me pueda seguir sacando tanta ventaja. Ya ni ha tocado a sus Buenavista.
Pith:
-¿Y eso qué? Pero ya está cocinándose en mi cabeza la nueva entrega. En cualquier rato de inspiración sale.
Danielov:
-Eh… yo tengo muchos más temas cocinándose. La lista de temas llenan dos páginas.
Pith:
-Yo no tengo tantos temas, pero no le hace, a mi me salen de pronto; así que nunca jamás me alcanzará. Además considere que usted empezó su blog mucho antes que yo.
Danielov:
-Pues sí, pero ps no vale por todo el tiempo que estuve con blog cerrado.
Pith:
-Ay, ni que hubiera sido tanto. Es que, ¿sabe qué? Le agarré un buen de ventaja en las fechas de su boda, que era entrada por día.
Danielov:
-Tramposo. Pero ya la verá…
Pith:
-¿La veré?¬¬
Danielov:
-…Ora que esté tiradote en la cama el fin de semana, agarraré la laptop de Catherine para empezar mis diarreas mentales, pa’ que se lo sepa.
Pith:
-Nel, yo haré un pacto con Catherine pa’ que no se la empreste. Además, no creo que la tenga muy contenta, con eso de las restricciones médicas… mua ja ja ja. Tiene todas las de perder, ríndase.
Danielov:
-Que no y que no. Si no, me largaré toda la mañana a casa de mi jefa, pa’ escribir tranquilo en mi cuarto de soltero.
Pith:
-Pues su jefa irá a llevar comida a la construcción, así que no podrá entrar a su antigua casa.
Danielov:
-Yo tengo llaves todavía, se aguanta. Es más, tengo llaves de puertas de las que mi madre no tiene.
Pith:
-Este… em… puesn… no me importa, no me alcanzará. Soy el blogger más rápido del occidente.
Danielov:
-Bah, pues yo soy uno de los mecanógrafos más rápidos de los alrededores, escribo más rápido de lo que pienso.
Pith:
-¿Quiere apostar?
Danielov:
-Además, hasta ahora la blogger más rápida es la Malquerida por publicar entrada diaria. No sea plagiario. Además yo le gano porque yo puedo ver dónde voy apretándole a las teclas, además que yo directamente checo mis textos; todavía usted necesita que se los chequen en contenido visual… ¡Toma…!!!
Pith:
-Pero, aquí se está discutiendo de que no me alcanzará en cantidad de entradas, no me importa si me las tienen qué checar… digo, las entradas, claro.
Danielov:
-Pues en lo que se las checo, las entradas, yo ya publiqué más, fíjese, ¿eh? ¿eh?
Pith:
-Pues mi blog es más visitado. ¡Ja!
Danielov:
-ah ¿sí?, pues… mi papá es más grande, pesado y sangrón que el suyo, fíjese...
Pith:
-Ñeeee… pero el mío es más mandón.
Danielov:
-Ñeh, pero el mío es más prieto. Aparte que yo aparezco como disponible en MSN y usté no.
Pith:
-No me importa, porque mi messenger falla más que el suyo.
Danielov:
-Pues mi mamá tiene los ojos más verdes que la suya. Aparte que es más cachetona, jejeje…
Pith:
-Pues mi hermana es más flaca que la suya, :D
Danielov:
-Pero a mí me duele la espalda más que a usted.
Pith:
-¡Sí! Pero yo tengo la frente más grande que usted.
Danielov:
-No, la mía es aún más grande debido a que mi orbe craneal es de un volumen superior al suyo.
Pith:
-¿Y qué? si yo tengo una nariz en el grano. Además, yo no veo, y usted sí.
Danielov:
-Ahí está, le gano porque veo más que usted. Se autoensartó. ¡Winner!!!
lunes, 25 de octubre de 2010
martes, 19 de octubre de 2010
Mi sentir
El cariño que te profeso es inmortal, mas no inmune;
seguro tu sientes por mí un cariño igual, pero tu trato me confunde.
Cuando a tu lado voy quisiera sentirme protegido,
y aunque sé que lo estoy, tus palabras de temor me han sobrecogido.
No te haría daño mostrarme un poco más tu cariño,
por lo menos una vez al año, como cuando le hablas a un niño.
O preocúpate por lo que siento y no por lo que crees que pienso.
Dame palabras de aliento y no me trates como a un menso.
Toma mi mano o abrázame sin que sea obligación;
enorgullécete de mí y compláceme de todo corazón.
Camina a mi lado con el fin de apoyarme,
y cuando esté equivocado, sin echármelo en cara, muéstrame.
Esto no es un reclamo ni quiero discutir,
solo desde mi corazón clamo y te digo mi sentir.
Y si de todos modos no sirve esta expresión,
yo te quiero, el primero de todos, y te doy mi admiración.
seguro tu sientes por mí un cariño igual, pero tu trato me confunde.
Cuando a tu lado voy quisiera sentirme protegido,
y aunque sé que lo estoy, tus palabras de temor me han sobrecogido.
No te haría daño mostrarme un poco más tu cariño,
por lo menos una vez al año, como cuando le hablas a un niño.
O preocúpate por lo que siento y no por lo que crees que pienso.
Dame palabras de aliento y no me trates como a un menso.
Toma mi mano o abrázame sin que sea obligación;
enorgullécete de mí y compláceme de todo corazón.
Camina a mi lado con el fin de apoyarme,
y cuando esté equivocado, sin echármelo en cara, muéstrame.
Esto no es un reclamo ni quiero discutir,
solo desde mi corazón clamo y te digo mi sentir.
Y si de todos modos no sirve esta expresión,
yo te quiero, el primero de todos, y te doy mi admiración.
Categoría:
Personal,
poemas,
sentimentalismos
jueves, 14 de octubre de 2010
Sabios razonamientos
Mente brillante:
-Oye, ¿le puedes pasar corriente a mi carro?
Interlocutor:
-¿Pues qué no acabas de comprar batería nueva?
Mente brillante:
-Sí, pero no sirve. Dicen que a veces salen malas.
Interlocutor:
-¿Y qué no tiene 3 años de garantía?
Mente brillante:
-Son 5 años.
Interlocutor:
-Pfff, chida tu batería.
Mente brillante:
-¿Entonces, me ayudas?
Interlocutor:
-A ver, dime algo: el carro no prende, pero, ¿prenden las luces?
Mente brillante:
-Sí.
Interlocutor:
-¿Enciende el radio?
Mente brillante:
-Sí.
Interlocutor:
-¿Puedes subir y bajar los vidrios ELÉCTRICOS de tu carro?
Mente brillante:
-Sí, pero aún así no prende el carro, así que debe ser la batería que no tiene carga, porque el voltímetro marca muy bajo voltaje. Bueno, solo cuando el carro está apagado, porque cuando el carro estaba prendido el voltámetro marcaba bien.
Interlocutor:
-Ajá... Qué cosa tan más extraña.
Mente brillante:
-Espera... entonces no es la batería ¿verdad? Debe ser la marcha, que no sirve.
Interlocutor:
-Hombre, pero qué inteligente eres. Yo no lo habría descubierto. Pero no pienses tanto, que vas a quemar tu cerebro.
-Oye, ¿le puedes pasar corriente a mi carro?
Interlocutor:
-¿Pues qué no acabas de comprar batería nueva?
Mente brillante:
-Sí, pero no sirve. Dicen que a veces salen malas.
Interlocutor:
-¿Y qué no tiene 3 años de garantía?
Mente brillante:
-Son 5 años.
Interlocutor:
-Pfff, chida tu batería.
Mente brillante:
-¿Entonces, me ayudas?
Interlocutor:
-A ver, dime algo: el carro no prende, pero, ¿prenden las luces?
Mente brillante:
-Sí.
Interlocutor:
-¿Enciende el radio?
Mente brillante:
-Sí.
Interlocutor:
-¿Puedes subir y bajar los vidrios ELÉCTRICOS de tu carro?
Mente brillante:
-Sí, pero aún así no prende el carro, así que debe ser la batería que no tiene carga, porque el voltímetro marca muy bajo voltaje. Bueno, solo cuando el carro está apagado, porque cuando el carro estaba prendido el voltámetro marcaba bien.
Interlocutor:
-Ajá... Qué cosa tan más extraña.
Mente brillante:
-Espera... entonces no es la batería ¿verdad? Debe ser la marcha, que no sirve.
Interlocutor:
-Hombre, pero qué inteligente eres. Yo no lo habría descubierto. Pero no pienses tanto, que vas a quemar tu cerebro.
Categoría:
Te mueres si te ríes
lunes, 4 de octubre de 2010
Las aventuras de los hermanos Buenavista. Capítulo 4: Una vieja leyendo ebria.
Yoni:
-Otra vez camino sin dirección,
acompañado por la inmensidad de una noche fría y gris.
Y la luna que llena el crepúsculo,
me baña en matices de nostalgia, al reflejar tu rostro.
Me siento tan triste y tan infeliz… ¡tan lleno de ansiedad!
No sé qué nos separó y com…
Elvelos:
-Yoóo-niíií… --toc, toc, toc-- yaáaa sal del baaáañoooo.
Mará:
-Ándale Yoni, ¿no ves que ya se anda se anda?
Yoni:
-Yo no veo nada. Además, qué afán de interrumpirle a uno hasta en el trono, en plena fabricación y tiradero de…
Elvelos:
-Este… prefiero no saberlo. Pero rápido, que ya me ando meando.
Yoni:
-Fíjate que ya terminé, solo que me inspiré y me agarré cantando. Pero ahí está, pues.
* Sale del baño visiblemente más delgado de como entró, fenómeno físico difícil de explicar.*
Mará:
-Qué bien, ahora ayúdame a desempacar y a acomodar nuestra ropa y demás pertenencias en este mugroso cuartucho… que ni departamento es.
Yoni:
-No seas quejumbrosa, está bien. Claro, solo tenemos dos camas individuales, y la cocina la tenemos en la recámara, además de no contar con sala ni comedor, pero lo importante es tener dónde vivir. Además, ¡mira! –se acerca a una ventana —tenemos una hermosa vista del oriente.
Mará:
-Ash Yoni, esa ventana da al pasillo del edificio.
Yoni:
-¿Ah, sí? Claro, claro, es que me norteé un poco, pero es la otra ventana, ¡mira! Podremos ver el amanecer.
Mará:
-Claro, lástima que esa ventana esté orientada al poniente…
Yoni:
-¿Lo ves? Podremos ver la puesta de…
Mará:
-¡Tampoco! El edificio de enfrente tapa la vista… ¡así que ya deja de decir tonterías y ayúdame a desempacar!
Yoni:
-¿Pero qué quieres desempacar? Tú no te preocupes, que desempaco mañana e instalo todo.
Mará:
-¿De verdad? ¿Pero como vas a saber cómo acomodar la ropa, y por colores?
Yoni:
-¿Ropa? Nooo mujer, si ahí no hay ropa. Solo está mi súper estereo Sony con sus bocinotas y sus boofers, y claro, la computadora de escritorio, que no podía faltar. Bueno, y en la bolsita de enfrente traigo mi iPod, aunque eso es más pequeño, no es necesario instalar…
Mará:
-¡Con razón estaba tan pesada! Pero, ¿y tu ropa? ¿Y la mía? ¿Y la de Elvelos?
Yoni:
-Pues la saqué, si no, no cabían mis cosas… Mará… qué vas a… ¡aaáaáaáaáyyyyyy!
* Lo toma de los cabellos mientras le atiza sendos pellizcos…*
Mará:
-¡Pero qué rayos te sucede! ¿Qué vamos a hacer ahora sin ropa? ¡Y seguramente también sacaste mis cosméticos, mi cepillo, la plancha y todo lo demás! ¿Verdad?
Yoni:
-Pus… y si te digo que sí, ¿qué me haces?
Mará:
-Esta noche hay funeral.
Yoni:
-Entonces, fíjate que se salieron solas. ¡Pero espera! No hay problema… mira, tú traes ropa puesta, y Elvelos trae su uniforme para la escuela, ¿qué más podemos pedir? Plancha podemos pedir prestada y el cepillo se puede comprar en una tienda…
Mará:
-Claro, ¿verdad? ¡Y usar esta ropa todos los días! ¿Eso es lo que dices? Además tú vienes en pijama.
Elvelos desde adentro del baño:
-Este… jejeje, tu pijamita morada…
Mará:
-Ash Elvelos, otra vez con eso. Es azul, pero ya es por demás que te lo diga.
Yoni:
-Bueno, pero yo no voy a salir de la casa, así que no habrá problema.
Mará:
-Es increíble… bueno, ya mañana veremos como solucionamos esto. Por lo pronto… --puf! — Ay no, ¡lo que nos faltaba!
Elvelos:
-Este... ¿pueden prender la luz por favor?
Mará:
-Se fue la luz… y este mugroso departamento está más oscuro que una boca de lobo.
Yoni:
-¿Cómo es una boca de lobo?
Mará:
-Cállate y mejor vamos a pedirle unas velas a Ifigenio.
* Salen ambos*
Elvelos:
-Este… ¿me van a dejar solo…? Oigan, aquí está muy oscuro… híjole, ya se fueron. Mejor salgo del baño, por si pasa algo no esté en esta posición tan desventajosa. Este… sí que está oscuro este lugar, y da miedo estando solo.
* En ese momento, empiezan a escucharse voces apagadas, como conversaciones, pero en un tono muy bajo. Al mismo tiempo, suenan lo que parecen ser gritos lejanos y gemidos intermitentes.*
Elvelos:
-¡Ay Dios! Esto no es divertido, niños… dejen de estar jugando.
* Pero los sonidos no cesan, y Elvelos comienza a ponerse nervioso, así que toma una sábana de una de las camas y se envuelve en ella, acurrucándose en un rincón del departamento: *
* * *
Mientras tanto, los dos muchachos llegan a donde Ifigenio para pedirle algunas velas.
Ifigenio:
-¿Se les ofrece algo, pequeños saltamontes?
Mará:
-¿Pero qué rayos le sucede a este payaso?
Yoni:
-Tranquila, deja que yo hable. Mire señor Iginefio…
Ifigenio:
-… ¡Mi nombre es I-fi-ge-nio!
Yoni:
-… sí, por eso. Es que se fue la luz en nuestro departamento, y veníamos a preguntarle si de casualidad no tendrá unas velitas que nos facilite. Yo no las requiero, pero ya ve que estos niños son bien escandalosos.
Ifigenio:
-Sí, por supuesto.
Mará:
-¿Está diciendo que sí somos escandalosos y exagerados? ¡So grosero!
Ifigenio:
-No, por Dios, no. Yo decía que sí tengo unas velas que puedo facilitarles. Mas sin en cambio, no voy a regalárselas, desde luego; tendrán qué pagarme por estos instrumentos de iluminación cerosa (es decir, que funcionan a base de cera, por si ustedes no entienden ese lenguaje). ¿Por qué? Pues porque todo cuesta en esta vida, y hay que pagar por los servicios. ¿Para qué? Precisamente para poder obtener estos servicios. ¿Y a quién hay que pagarle? Pues al que dé el servicio. ¿Y quién da el servicio? Pues en este caso soy yo.
Mará:
-Ash, esta gente… ¡tome! Me supongo que no nos cobrará más de eso por tres velas…
Ifigenio:
-No, está perfecto. Aquí las tiene --Yoni estira la mano para recibirlas --, Hey, ¡cuidado! ¡Deje mi nariz… caramba, mi ojo…! Chamaco pedante…
Mará:
-Mira mira Yoni, baja tus manitas, y deja que yo las agarre, ¿sí? Usted disculpe, es que no ve el pobre infeliz éste.
Yoni:
-Órale, infeliz el abuelo del señor Inigefio.
Ifigenio:
-¡Caramba! Con este muchacho insolentoso…
Mará:
-No haga caso. Gracias, y buenas noches. Ah, por cierto: ¿Cuándo cree que regrese la luz?
Ifigenio:
-Bueno, ya reporté el problema, pero me dijeron que la luz regresaría hasta mañana.
Mará:
-¿Hasta mañana?
Yoni:
-Ay Mará, pareces el eco. Claro que hasta mañana, ¿qué estás sorda?
Mará:
-¡Sí estoy gorda! ¿Pero y eso qué?
Yoni:
-Dije sorda, sooor-daaa. Y claro que la luz vuelve mañana, cuando salga el sol.
Mará:
-¡Me refiero a la luz eléctrica! Pero en fin, pasaremos la noche así, si no hay más remedio. Buenas noches.
Yoni:
-Hasta mañana, señor…
Ifigenio:
-… Sí sí, hasta mañana, ya no diga mi nombre por favor.
*Ambos suben a su departamento.*
*Al llegar, Mará trae encendida una de las velas que les diera el administrador sobre un pequeño plato de plástico, y debido a la luz de ésta, alcanza a ver a Elvelos acurrucado y temblando en un rincón del cuarto, completamente envuelto por la sábana.*
Mará:
-¿Pero qué te pasa Elvelos?
Elvelos:
-¡Ay…! Híjole, me asustaste.
Mará:
-Hombre ¿pero qué tienes?
Elvelos:
-Este… pus es que has de cuenta que allá afuera se oyen ruidos… como voces, y gritos… ¡creo que son fantasmas o algo así!
Mará:
-No seas sonzo, ya sabes que los fantasmas no existen. Además, claro que no se oye nada… --“¡aaáaaáaáaaáayyyyyyyy!”--.
Yoni:
-¡Carambolas!
Elvelos:
-¡Híjole!
Mará:
-A caray… ¿qué fue eso?
Elvelos, temblando de pies a cabeza:
-Has de cuenta que desde que se fueron ustedes se escucha eso, y se oye abrir y cerrar de puertas, y también de repente se oyen gritos pidiendo ayuda.
Yoni:
-¿Y si sí son fantasmas? ¿Demonios? ¿Vampiros? ¿Muer…?
Mará:
-¡Ya basta…!
Elvelos:
-¡Ay! Híjole, no grites, que me asustas.
Mará:
-Todos tranquilos ¿OK? Esos gritos no son ninguna de esas cosas, así que cálmense. Tal vez sean vecinos o niños jugando, o cualquier otra cosa.
Yoni:
-Fíjate que los gritos no suenan a niños, y además acuérdate que el señor Iginefio dijo que no había vecinos. Los únicos que hay son unos señores y pues los gritos suenan como de mujeres.
Mará:
-Pues sí, pero debe haber alguna explicación. Voy a preguntarle a…
Yoni y Elvelos:
-¡No! ¡no salgas…! ¡No me copies…!
Mará:
-Ash, ya basta.
Yoni:
-¿Y si es el Chotacabras?
Mará:
-Jajaja, ¿Qué es eso?
Yoni:
-No te rías, que es muy en serio. Leí algo sobre eso, e incluso la Biblia lo menciona. En otras traducciones lo llaman Lilith; y aparece en el libro de Isaías. Es algo así como un demonio… Cachoflas es el que sabe bien de esto.
Mará:
-Ya basta. Aquí lo único que ocurre es que hace mucho calor.
Yoni:
-Sí, lo sé. Analicé el asunto y llegué a la conclusión de que no podemos prender el ventilador, por la obvia razón de que: el aire apagaría las velas.
Mará:
-¡Ay Yoni! Pero qué inteligente eres.
Yoni:
-¿Verdad que sí?
Elvelos:
-Este… eres un sonzo. ¿Cómo pensabas prender el ventilador sin que haya electricidad?
Yoni:
-Ah… fíjate que no había pensado en eso. Entonces, de todas formas tenemos que aguantarnos el calor, porque al no haber luz… --¡aaáaaáayuúuuúuudaaáaaáaa! --¡Ay! Otra vez el Chotacabras.
Mará:
-¡Que no es el Chotacabras, Chupacabras o lo que sea! Y deja de ponernos más nerviosos.
Yoni:
-Tengo una idea: vamos a hablarle a Cachoflas para que nos diga bien eso que leí, él sí sabe.
* Toma su celular y marca el número del mencionado Cachoflas*
Yoni:
-¿Bueno? Mi hermanazo del alma. ¿Cómo le va…? ¡Qué bueno! ¿Y su mujercita, está bien también…? Perfecto. ¿Cómo van esos proyectos sobre escribir su libro…?
Mará:
-¿Te vas a poner a platicar, o le vas a preguntar lo que querías saber?
Yoni:
-Ah, lo siento: ¡Oiga! Fíjese que tenemos una duda. Fíjese que… --relata brevemente lo sucedido en aquellos momentos —entonces queremos saber sobre eso del Chotacabras, y qué tan probable es que sea eso lo que estamos oyendo.
Mará:
-¿Qué dice?
Yoni:
-Dice que eso es solo una vieja leyendo ebria.
Mará:
-¿Qué? ¿El Chotacabras es una mujer borracha…?
Yoni:
-...que lanzaba maldiciones contra todo el que pasaba por la tierra. ¿La tierra qué, mi amigo?
Mará:
-Mira, presta para acá ese celular, lo pondré en altavoz.
Cachoflas:
-¿Bueno? ¿Me oyen?
Mará:
-Sí, ahora escuchamos todos. ¿Qué rayos estás diciendo?
Cachoflas:
-Este sonzo que no entiende lo que le digo. ¡Dije que es una-vieja-leyenda-hebrea!
Yoni:
-Bueno, ¿y qué tal que era una vieja ebria leyendo la vieja leyenda hebrea?
Mará:
-¡Cállate! Continúa, Cachoflas. ¿Qué decías?
Cachoflas:
-Esa leyenda se derivó erróneamente por algunos rabinos a partir de una profecía de Isaías. Ésta fue una maldición para la tierra de los judíos, lanzada contra ellos por pasar más allá de la Ley de su Dios. Pero solo habla de animales salvajes que habitan en lugares inhóspitos. Entre ellos, cabras y aves carroñeras, entre las que está el chotacabras, del hebreo original "Lilith". No se trata de ningún demonio ni fantasmas que perduren hasta ahora.
Elvelos:
-Oooooh.
Yoni:
-Aaaaah. Ya veo.
Elvelos:
-¿Ya ves? ¡Es un milagro!
Yoni:
-¡Quiero decir que ya entiendo, ya capté!
Elvelos:
-Ah, ya se me hacía raro.
Cachoflas:
-De cualquier modo, creo que esos gritos y gemidos que escuchan, aunados a los alaridos pidiendo auxilio no son nada normales. Sobre todo si consideramos que casualmente se dan cuando la luz del edificio ha sido cortada.
Mará:
-¿Cortada? ¿Crees que fue intencional?
Cachoflas:
-No lo sé. Pero de cualquier forma voy para allá, este es un caso ideal para dar uso a mis habilidades detectivescas, refinadas tras años de leer las aventuras de mis héroes predilectos.
******
¿Qué será lo que sucede en este lúgubre edificio? ¿Serán verdaderamente cosas sobrenaturales? ¿Podrán Cachoflas y sus amigos Buenavista resolver el misterio?
-Otra vez camino sin dirección,
acompañado por la inmensidad de una noche fría y gris.
Y la luna que llena el crepúsculo,
me baña en matices de nostalgia, al reflejar tu rostro.
Me siento tan triste y tan infeliz… ¡tan lleno de ansiedad!
No sé qué nos separó y com…
Elvelos:
-Yoóo-niíií… --toc, toc, toc-- yaáaa sal del baaáañoooo.
Mará:
-Ándale Yoni, ¿no ves que ya se anda se anda?
Yoni:
-Yo no veo nada. Además, qué afán de interrumpirle a uno hasta en el trono, en plena fabricación y tiradero de…
Elvelos:
-Este… prefiero no saberlo. Pero rápido, que ya me ando meando.
Yoni:
-Fíjate que ya terminé, solo que me inspiré y me agarré cantando. Pero ahí está, pues.
* Sale del baño visiblemente más delgado de como entró, fenómeno físico difícil de explicar.*
Mará:
-Qué bien, ahora ayúdame a desempacar y a acomodar nuestra ropa y demás pertenencias en este mugroso cuartucho… que ni departamento es.
Yoni:
-No seas quejumbrosa, está bien. Claro, solo tenemos dos camas individuales, y la cocina la tenemos en la recámara, además de no contar con sala ni comedor, pero lo importante es tener dónde vivir. Además, ¡mira! –se acerca a una ventana —tenemos una hermosa vista del oriente.
Mará:
-Ash Yoni, esa ventana da al pasillo del edificio.
Yoni:
-¿Ah, sí? Claro, claro, es que me norteé un poco, pero es la otra ventana, ¡mira! Podremos ver el amanecer.
Mará:
-Claro, lástima que esa ventana esté orientada al poniente…
Yoni:
-¿Lo ves? Podremos ver la puesta de…
Mará:
-¡Tampoco! El edificio de enfrente tapa la vista… ¡así que ya deja de decir tonterías y ayúdame a desempacar!
Yoni:
-¿Pero qué quieres desempacar? Tú no te preocupes, que desempaco mañana e instalo todo.
Mará:
-¿De verdad? ¿Pero como vas a saber cómo acomodar la ropa, y por colores?
Yoni:
-¿Ropa? Nooo mujer, si ahí no hay ropa. Solo está mi súper estereo Sony con sus bocinotas y sus boofers, y claro, la computadora de escritorio, que no podía faltar. Bueno, y en la bolsita de enfrente traigo mi iPod, aunque eso es más pequeño, no es necesario instalar…
Mará:
-¡Con razón estaba tan pesada! Pero, ¿y tu ropa? ¿Y la mía? ¿Y la de Elvelos?
Yoni:
-Pues la saqué, si no, no cabían mis cosas… Mará… qué vas a… ¡aaáaáaáaáyyyyyy!
* Lo toma de los cabellos mientras le atiza sendos pellizcos…*
Mará:
-¡Pero qué rayos te sucede! ¿Qué vamos a hacer ahora sin ropa? ¡Y seguramente también sacaste mis cosméticos, mi cepillo, la plancha y todo lo demás! ¿Verdad?
Yoni:
-Pus… y si te digo que sí, ¿qué me haces?
Mará:
-Esta noche hay funeral.
Yoni:
-Entonces, fíjate que se salieron solas. ¡Pero espera! No hay problema… mira, tú traes ropa puesta, y Elvelos trae su uniforme para la escuela, ¿qué más podemos pedir? Plancha podemos pedir prestada y el cepillo se puede comprar en una tienda…
Mará:
-Claro, ¿verdad? ¡Y usar esta ropa todos los días! ¿Eso es lo que dices? Además tú vienes en pijama.
Elvelos desde adentro del baño:
-Este… jejeje, tu pijamita morada…
Mará:
-Ash Elvelos, otra vez con eso. Es azul, pero ya es por demás que te lo diga.
Yoni:
-Bueno, pero yo no voy a salir de la casa, así que no habrá problema.
Mará:
-Es increíble… bueno, ya mañana veremos como solucionamos esto. Por lo pronto… --puf! — Ay no, ¡lo que nos faltaba!
Elvelos:
-Este... ¿pueden prender la luz por favor?
Mará:
-Se fue la luz… y este mugroso departamento está más oscuro que una boca de lobo.
Yoni:
-¿Cómo es una boca de lobo?
Mará:
-Cállate y mejor vamos a pedirle unas velas a Ifigenio.
* Salen ambos*
Elvelos:
-Este… ¿me van a dejar solo…? Oigan, aquí está muy oscuro… híjole, ya se fueron. Mejor salgo del baño, por si pasa algo no esté en esta posición tan desventajosa. Este… sí que está oscuro este lugar, y da miedo estando solo.
* En ese momento, empiezan a escucharse voces apagadas, como conversaciones, pero en un tono muy bajo. Al mismo tiempo, suenan lo que parecen ser gritos lejanos y gemidos intermitentes.*
Elvelos:
-¡Ay Dios! Esto no es divertido, niños… dejen de estar jugando.
* Pero los sonidos no cesan, y Elvelos comienza a ponerse nervioso, así que toma una sábana de una de las camas y se envuelve en ella, acurrucándose en un rincón del departamento: *
* * *
Mientras tanto, los dos muchachos llegan a donde Ifigenio para pedirle algunas velas.
Ifigenio:
-¿Se les ofrece algo, pequeños saltamontes?
Mará:
-¿Pero qué rayos le sucede a este payaso?
Yoni:
-Tranquila, deja que yo hable. Mire señor Iginefio…
Ifigenio:
-… ¡Mi nombre es I-fi-ge-nio!
Yoni:
-… sí, por eso. Es que se fue la luz en nuestro departamento, y veníamos a preguntarle si de casualidad no tendrá unas velitas que nos facilite. Yo no las requiero, pero ya ve que estos niños son bien escandalosos.
Ifigenio:
-Sí, por supuesto.
Mará:
-¿Está diciendo que sí somos escandalosos y exagerados? ¡So grosero!
Ifigenio:
-No, por Dios, no. Yo decía que sí tengo unas velas que puedo facilitarles. Mas sin en cambio, no voy a regalárselas, desde luego; tendrán qué pagarme por estos instrumentos de iluminación cerosa (es decir, que funcionan a base de cera, por si ustedes no entienden ese lenguaje). ¿Por qué? Pues porque todo cuesta en esta vida, y hay que pagar por los servicios. ¿Para qué? Precisamente para poder obtener estos servicios. ¿Y a quién hay que pagarle? Pues al que dé el servicio. ¿Y quién da el servicio? Pues en este caso soy yo.
Mará:
-Ash, esta gente… ¡tome! Me supongo que no nos cobrará más de eso por tres velas…
Ifigenio:
-No, está perfecto. Aquí las tiene --Yoni estira la mano para recibirlas --, Hey, ¡cuidado! ¡Deje mi nariz… caramba, mi ojo…! Chamaco pedante…
Mará:
-Mira mira Yoni, baja tus manitas, y deja que yo las agarre, ¿sí? Usted disculpe, es que no ve el pobre infeliz éste.
Yoni:
-Órale, infeliz el abuelo del señor Inigefio.
Ifigenio:
-¡Caramba! Con este muchacho insolentoso…
Mará:
-No haga caso. Gracias, y buenas noches. Ah, por cierto: ¿Cuándo cree que regrese la luz?
Ifigenio:
-Bueno, ya reporté el problema, pero me dijeron que la luz regresaría hasta mañana.
Mará:
-¿Hasta mañana?
Yoni:
-Ay Mará, pareces el eco. Claro que hasta mañana, ¿qué estás sorda?
Mará:
-¡Sí estoy gorda! ¿Pero y eso qué?
Yoni:
-Dije sorda, sooor-daaa. Y claro que la luz vuelve mañana, cuando salga el sol.
Mará:
-¡Me refiero a la luz eléctrica! Pero en fin, pasaremos la noche así, si no hay más remedio. Buenas noches.
Yoni:
-Hasta mañana, señor…
Ifigenio:
-… Sí sí, hasta mañana, ya no diga mi nombre por favor.
*Ambos suben a su departamento.*
*Al llegar, Mará trae encendida una de las velas que les diera el administrador sobre un pequeño plato de plástico, y debido a la luz de ésta, alcanza a ver a Elvelos acurrucado y temblando en un rincón del cuarto, completamente envuelto por la sábana.*
Mará:
-¿Pero qué te pasa Elvelos?
Elvelos:
-¡Ay…! Híjole, me asustaste.
Mará:
-Hombre ¿pero qué tienes?
Elvelos:
-Este… pus es que has de cuenta que allá afuera se oyen ruidos… como voces, y gritos… ¡creo que son fantasmas o algo así!
Mará:
-No seas sonzo, ya sabes que los fantasmas no existen. Además, claro que no se oye nada… --“¡aaáaaáaáaaáayyyyyyyy!”--.
Yoni:
-¡Carambolas!
Elvelos:
-¡Híjole!
Mará:
-A caray… ¿qué fue eso?
Elvelos, temblando de pies a cabeza:
-Has de cuenta que desde que se fueron ustedes se escucha eso, y se oye abrir y cerrar de puertas, y también de repente se oyen gritos pidiendo ayuda.
Yoni:
-¿Y si sí son fantasmas? ¿Demonios? ¿Vampiros? ¿Muer…?
Mará:
-¡Ya basta…!
Elvelos:
-¡Ay! Híjole, no grites, que me asustas.
Mará:
-Todos tranquilos ¿OK? Esos gritos no son ninguna de esas cosas, así que cálmense. Tal vez sean vecinos o niños jugando, o cualquier otra cosa.
Yoni:
-Fíjate que los gritos no suenan a niños, y además acuérdate que el señor Iginefio dijo que no había vecinos. Los únicos que hay son unos señores y pues los gritos suenan como de mujeres.
Mará:
-Pues sí, pero debe haber alguna explicación. Voy a preguntarle a…
Yoni y Elvelos:
-¡No! ¡no salgas…! ¡No me copies…!
Mará:
-Ash, ya basta.
Yoni:
-¿Y si es el Chotacabras?
Mará:
-Jajaja, ¿Qué es eso?
Yoni:
-No te rías, que es muy en serio. Leí algo sobre eso, e incluso la Biblia lo menciona. En otras traducciones lo llaman Lilith; y aparece en el libro de Isaías. Es algo así como un demonio… Cachoflas es el que sabe bien de esto.
Mará:
-Ya basta. Aquí lo único que ocurre es que hace mucho calor.
Yoni:
-Sí, lo sé. Analicé el asunto y llegué a la conclusión de que no podemos prender el ventilador, por la obvia razón de que: el aire apagaría las velas.
Mará:
-¡Ay Yoni! Pero qué inteligente eres.
Yoni:
-¿Verdad que sí?
Elvelos:
-Este… eres un sonzo. ¿Cómo pensabas prender el ventilador sin que haya electricidad?
Yoni:
-Ah… fíjate que no había pensado en eso. Entonces, de todas formas tenemos que aguantarnos el calor, porque al no haber luz… --¡aaáaaáayuúuuúuudaaáaaáaa! --¡Ay! Otra vez el Chotacabras.
Mará:
-¡Que no es el Chotacabras, Chupacabras o lo que sea! Y deja de ponernos más nerviosos.
Yoni:
-Tengo una idea: vamos a hablarle a Cachoflas para que nos diga bien eso que leí, él sí sabe.
* Toma su celular y marca el número del mencionado Cachoflas*
Yoni:
-¿Bueno? Mi hermanazo del alma. ¿Cómo le va…? ¡Qué bueno! ¿Y su mujercita, está bien también…? Perfecto. ¿Cómo van esos proyectos sobre escribir su libro…?
Mará:
-¿Te vas a poner a platicar, o le vas a preguntar lo que querías saber?
Yoni:
-Ah, lo siento: ¡Oiga! Fíjese que tenemos una duda. Fíjese que… --relata brevemente lo sucedido en aquellos momentos —entonces queremos saber sobre eso del Chotacabras, y qué tan probable es que sea eso lo que estamos oyendo.
Mará:
-¿Qué dice?
Yoni:
-Dice que eso es solo una vieja leyendo ebria.
Mará:
-¿Qué? ¿El Chotacabras es una mujer borracha…?
Yoni:
-...que lanzaba maldiciones contra todo el que pasaba por la tierra. ¿La tierra qué, mi amigo?
Mará:
-Mira, presta para acá ese celular, lo pondré en altavoz.
Cachoflas:
-¿Bueno? ¿Me oyen?
Mará:
-Sí, ahora escuchamos todos. ¿Qué rayos estás diciendo?
Cachoflas:
-Este sonzo que no entiende lo que le digo. ¡Dije que es una-vieja-leyenda-hebrea!
Yoni:
-Bueno, ¿y qué tal que era una vieja ebria leyendo la vieja leyenda hebrea?
Mará:
-¡Cállate! Continúa, Cachoflas. ¿Qué decías?
Cachoflas:
-Esa leyenda se derivó erróneamente por algunos rabinos a partir de una profecía de Isaías. Ésta fue una maldición para la tierra de los judíos, lanzada contra ellos por pasar más allá de la Ley de su Dios. Pero solo habla de animales salvajes que habitan en lugares inhóspitos. Entre ellos, cabras y aves carroñeras, entre las que está el chotacabras, del hebreo original "Lilith". No se trata de ningún demonio ni fantasmas que perduren hasta ahora.
Elvelos:
-Oooooh.
Yoni:
-Aaaaah. Ya veo.
Elvelos:
-¿Ya ves? ¡Es un milagro!
Yoni:
-¡Quiero decir que ya entiendo, ya capté!
Elvelos:
-Ah, ya se me hacía raro.
Cachoflas:
-De cualquier modo, creo que esos gritos y gemidos que escuchan, aunados a los alaridos pidiendo auxilio no son nada normales. Sobre todo si consideramos que casualmente se dan cuando la luz del edificio ha sido cortada.
Mará:
-¿Cortada? ¿Crees que fue intencional?
Cachoflas:
-No lo sé. Pero de cualquier forma voy para allá, este es un caso ideal para dar uso a mis habilidades detectivescas, refinadas tras años de leer las aventuras de mis héroes predilectos.
******
¿Qué será lo que sucede en este lúgubre edificio? ¿Serán verdaderamente cosas sobrenaturales? ¿Podrán Cachoflas y sus amigos Buenavista resolver el misterio?
Categoría:
Las aventuras de los hermanos Buenavista
domingo, 3 de octubre de 2010
Un inculto siempre es "diferiente" a otro
"Diferiencia":
Dícese de un rasgo que hace a un objeto, persona, situación, etc, "diferiente" a otro/a
Ejemplos:
Juan Gabriel.
Dícese de un rasgo que hace a un objeto, persona, situación, etc, "diferiente" a otro/a
Ejemplos:
La difer[i]encia, entre tu y yo, tal vez sería corazón
que yo en tu lugar... que yo en tu lugar...
si te amaría.
Juan Gabriel.
Categoría:
La real epidemia de la lengua mexicana
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